El director de farmacología y terapéutica de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República, y miembro de la Lista 360, Gustavo Tomasiunas, participó junto a Aracelis Delgado de la charla que organizamos para hablar de uno de los temas que más preocupa a la ciudadanía: el acceso a la salud
Tomasiunas destacó la gravedad de este problema en Uruguay y remarcó la importancia de que “nos organicemos como sociedad civil”, porque la forma como se gestiona la salud “tiene que ver con el acceso a recibir la atención necesaria y con abastecimiento o el desabastecimiento de medicamentos”.
“Hay que ver cómo mejoramos el acceso a una salud integral, que tiene que ver con los turnos y el acceso a especialistas. Cada vez más nos acostumbramos a que para conseguir un turno pasen dos o tres meses. Esto pasa incluso dentro de Montevideo mismo pero mucho más en el interior donde un sector muy importante de la población se atiende en el sector público”, explicó.
Tomasiunas explicó que la forma de gestionar es clave para resolver algunos problemas de acceso a la salud, porque en algunos lugares “tenemos aparatos sofisticados encerrados en una habitación que no se usan porque no está el técnico o porque no hay capacitación para hacerlo. Eso también es falta de acceso”.
En cuanto al tema de los medicamentos, el profesional señaló que “el paciente es muchas veces instrumento de una estrategia comercial” en la demanda por determinada marca de medicamento, lo que se transforma “en un círculo miserable donde siempre gana la industria, porque le sirve más al laboratorio”.
“El desabastecimiento de algunos medicamentos en ASSE comenzó la pandemia, pero ahora que ya se superó la crisis sanitaria los problemas siguen y eso también tiene que ver con una forma de gestionar la salud pública”, agregó.
Tomasiunas se refirió también a los medicamentos genéricos que pueden ser una solución más económica para el desabastecimiento, pero lamentó que pese a que el decreto es de 2007, “nunca se pudo llevar adelante por distintos problemas, sobre todo porque a algunas empresas farmacéuticas no quieren que suceda”.
“Los genéricos pasan por distintos estudios de calidad para que sean comparables al original. Esto ya no se discute en gran parte del mundo, pero aquí todavía tenemos la cultura de que si es original es mejor. En EEUU está incorporada la cultura del genérico y en Uruguay cuesta muchísimo incorporarla. La política de genéricos debe desarrollarse porque el original sale varias veces más caro y es igual al genérico”, indicó.
Por último, el especialista se refirió a los juicios de amparo contra el Estado por la dificultad de algunos pacientes para acceder a determinados medicamentos. “La mayoría de los juicios los pierde el Estado porque hay un problema de acceso a los medicamentos y el gobierno tiene que pagar rápidamente por algo que no se previó. Con lo que se gasta en amparos y juicios perdidos se podría perfectamente financiar el Hospital de Clínicas”, concluyó.
